El sector apícola de Tucumán cuenta con un producto estrella, que se proyecta en mercados internacionales: la miel de azahar de limón. En la provincia se producen 460 toneladas por año de miel que incluyen las diferentes variedades: miel de monte, de algarrobo, de mistol y, por supuesto, la de limón. Del volumen total de producción, 60 toneladas anuales le corresponden a la miel monofloral de azahar de limón.

Según un informe de la Mesa Interinstitucional del Sector Apícola -que integran numerosas entidades públicas y privadas de la provincia que potencian la producción local de miel- el 90% de la de miel de azahar de limón tucumana se exporta a los exigentes mercados de Estados Unidos, de Alemania, de Japón, de España y de Italia. En Tucumán hay registrados 135 productores apícolas, con 18.450 colmenas.

Una de las ventajas de la miel de azahar de limón, que le permite potenciar sus exportaciones, es que hay poca oferta en otros mercados. Por ejemplo, en España se elabora miel de otras frutas cítricas, como naranja o mandarina, pero no se consigue de limón. Por los elevados costos internos, el país europeo incrementó en el año 2002 la importación de miel.

El proceso de producción de la miel de limón en Tucumán consiste en un protocolo que está validado por los productores desde hace muchos. Comienza en julio, cuando los apicultores llevan sus colmenas hasta las inmediaciones de las plantaciones de limón. Las abejas, que reposan aproximadamente desde marzo o abril, son estimuladas con un jarabe artificial. Esta herramienta anticipa el ciclo reproductivo de las abejas reinas y permite que las obreras comiencen a volar en busca de las flores cercanas para producir la miel.

Rasgos únicos

"La miel de limón se caracteriza por su color claro y por su aroma suave a la flor del azahar. Tiene un dulzor moderado que se combina con una ligera nota ácida. Estos rasgos definen al producto como único e inigualable", remarca el informe. Estas características permitieron que, recientemente, la miel de limón obtenga el sello de Identificación Geográfica (IG) que le otorgó la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación.

La IG determina que el área de producción de la miel de limón está localizada en la zona de producción citrícola de Tucumán. Esta zona incluye a los departamentos de Burruyacú, de Tafí Viejo, de Famaillá, de Monteros, de Chicligasta, de La Cocha, de Lules, de Juan Bautista Alberdi, de Cruz Alta, de Río Chico y de Yerba Buena.

La identidad de las mieles

Tucumán no es la única provincia que cuenta con una miel propia. La diversidad geográfica de la Argentina potencia el desarrollo de la actividad apícola en todas las regiones y posibilita la obtención de mieles tanto multiflorales (provenientes de praderas naturales o de montes nativos) como las monoflorales más buscadas en el mercado, como es el caso de la miel de limón.

La Secretaría de Agricultura de la Nación elaboró un Mapa Regional de Identidad de las Mieles cuyo objetivo es ampliar el conocimiento sobre este alimento. En este mapa de identidades se encuentran los distintos tipos de miel en función de su origen, con su ubicación geográfica según las regiones donde se las producen.