Durante el mes de abril, los precios de los agroalimentos se elevaron significativamente, multiplicándose 3,5 veces desde el campo hasta la góndola, según revela el Índice de Precios en Origen y Destino (IPOD) desarrollado por el sector de Economías Regionales de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME). 

Esta disparidad refleja que por cada peso que recibe el productor, el consumidor paga 3,5 pesos. En este contexto, entre los productos que registraron las mayores discrepancias entre los precios de origen y destino se encuentran el limón (12,3 veces), la mandarina (6,9) y  la naranja (6,3). 

Con aumentos un poco menos elevados se ubican la pera (5,9) y la carne de cerdo (5,6). En contraste, los productos de la canasta frutihortícola, como el tomate redondo y pimiento (2,1 veces), la calabaza y cebolla (1,9 veces), y la frutilla (1,2 veces), presentaron menores diferencias de precios.

Según reveló el informe, la participación del productor representó en promedio el 31,4% del precio final de venta, siendo los productores de frutilla los que recibieron una mayor participación (81%), mientras que los de limón obtuvieron la menor (8,1%).