Hasta hace apenas un año, el aeropuerto Benjamín Matienzo de Tucumán no tenía conexiones internacionales confirmadas. Hoy, la realidad cambió drásticamente: vuelos ya operativos y nuevas rutas en camino posicionan a la provincia como un actor clave en la conectividad aérea del norte argentino. Este renovado protagonismo no solo fortalece la presencia de Tucumán en el mapa regional, sino que también proyecta un impacto económico significativo en turismo, comercio y negocios.

Aerolíneas Argentinas ya vuela a Punta Cana con una frecuencia semanal. A partir del 24 de septiembre, Copa Airlines unirá Tucumán con Ciudad de Panamá tres veces por semana, consolidando una puerta de entrada a Centroamérica y el Caribe. En diciembre, LATAM Perú reanudará la conexión con Lima, una ruta muy esperada que vuelve tras casi seis años.

Pero lo más prometedor es lo que se avecina: Avianca, uno de los gigantes latinoamericanos del sector aeronáutico, estaría en negociaciones avanzadas para operar vuelos regulares entre Tucumán y Bogotá. De concretarse, esta incorporación marcaría un hito histórico: por primera vez, la provincia contaría con cuatro destinos internacionales directos, rivalizando con Salta en la carrera por convertirse en el principal nodo aéreo del norte del país.

El impacto económico de volar más lejos

Este nuevo escenario representa una oportunidad estratégica para el sector productivo y empresarial tucumano. La conectividad aérea internacional no solo impulsa el turismo receptivo -especialmente de mercados como el brasileño, colombiano y estadounidense-, sino que también agiliza las exportaciones no tradicionales y favorece el intercambio comercial con regiones clave de América Latina.

Imagen tomada de Instagram/@vuelosyspotters
Imagen tomada de Instagram/@vuelosyspotters

El desembarco de Avianca, que ya fue autorizado por la autoridad aeronáutica colombiana para operar vuelos a Córdoba, Mendoza y Rosario desde Bogotá a través de su filial ecuatoriana, abre una ventana optimista para Tucumán. Aunque todavía no hay una solicitud formal para operar desde/hacia esta provincia, fuentes del sector aseguran que el interés existe y que las conversaciones están avanzadas.

Del olvido a la competencia regional

En 2017, Avianca Argentina había coqueteado con la idea de operar en Tucumán, pero sus planes quedaron truncos. Ocho años después, el panorama parece muy distinto: la reconfiguración del mercado aerocomercial pospandemia y la revalorización del norte argentino como destino turístico y centro logístico abren un nuevo capítulo para la provincia.

Tucumán ya no se conforma con mirar desde abajo el crecimiento de Salta. Con un aeropuerto que amplía sus rutas y un sector público activo en la gestión de nuevas conexiones, la provincia se posiciona como un hub aéreo en expansión. Si se concreta la llegada de Avianca, será mucho más que una ruta nueva: será una muestra de que Tucumán está listo para jugar en las grandes ligas.